Las existencias de robots operativos en todo el mundo han alcanzado un nuevo récord, con unos 3,9 millones de unidades; con una demanda impulsada por una serie de innovaciones tecnológicas. En este contexto, la Federación Internacional de Robótica (IFR) ha desglosado las cinco principales tendencias de automatización para 2024.
La tendencia a utilizar Inteligencia Artificial en robótica y automatización sigue creciendo. La aparición de la IA generativa abre nuevas soluciones. Este subconjunto de IA está especializado en crear algo nuevo a partir de cosas que ha aprendido mediante entrenamiento, y ha sido popularizado por herramientas como ChatGPT. Los fabricantes de robots están desarrollando interfaces basadas en IA generativa que permiten a los usuarios programar robots de forma más intuitiva utilizando lenguaje natural en lugar de código. Los trabajadores ya no necesitarán conocimientos especializados de programación para seleccionar y ajustar las acciones del robot.
Otro ejemplo es la IA predictiva, que analiza los datos de rendimiento de los robots para identificar el estado futuro de los equipos. El mantenimiento predictivo puede ahorrar a los fabricantes costes de inactividad de las máquinas. En el sector de piezas de automoción, se calcula que cada hora de inactividad imprevista cuesta 1,3 millones de dólares, según informa la Information Technology & Innovation Foundation. Esto indica el enorme potencial de ahorro del mantenimiento predictivo. Los algoritmos de aprendizaje automático también pueden analizar datos de varios robots que realizan el mismo proceso para optimizarlo. En general, cuantos más datos reciba un algoritmo de aprendizaje automático, mejor será su rendimiento.
La colaboración entre humanos y robots sigue siendo una tendencia importante en robótica. Los rápidos avances en sensores, tecnologías de visión y pinzas inteligentes permiten a los robots responder en tiempo real a los cambios de su entorno y trabajar así con seguridad junto a los trabajadores humanos.
Las aplicaciones de robots colaborativos ofrecen una nueva herramienta a los trabajadores humanos, aliviándoles y apoyándoles. Pueden ayudar en tareas que requieren levantar objetos pesados, realizar movimientos repetitivos o trabajar en entornos peligrosos.
La gama de aplicaciones colaborativas que ofrecen los fabricantes de robots sigue ampliándose. Una novedad reciente en el mercado es el aumento de las aplicaciones de soldadura con cobot, impulsadas por la escasez de soldadores cualificados. Esta demanda demuestra que la automatización no está provocando una escasez de mano de obra, sino que ofrece un medio para solucionarla. Por tanto, los robots colaborativos complementarán -no sustituirán- las inversiones en robots industriales tradicionales, que funcionan a velocidades mucho más rápidas, por lo que seguirán siendo importantes para mejorar la productividad en respuesta a los estrechos márgenes de los productos.
También están entrando en el mercado nuevos competidores centrados específicamente en los robots colaborativos. Los manipuladores móviles, la combinación de brazos robóticos colaborativos y robots móviles (AMR), ofrecen nuevos casos de uso que podrían ampliar sustancialmente la demanda de robots colaborativos.
Los manipuladores móviles -llamados "MoMas"- están automatizando las tareas de manipulación de materiales en industrias como la automovilística, la logística o la aeroespacial. Combinan la movilidad de las plataformas robóticas con la destreza de los brazos manipuladores. Esto les permite desplazarse por entornos complejos y manipular objetos, lo que resulta crucial para las aplicaciones en la industria manufacturera. Equipados con sensores y cámaras, estos robots realizan inspecciones y llevan a cabo tareas de mantenimiento en maquinaria y equipos. Una de las ventajas significativas de los manipuladores móviles es su capacidad para colaborar y apoyar a los trabajadores humanos. Es probable que la escasez de mano de obra cualificada y la falta de personal que solicite puestos de trabajo en las fábricas aumenten la demanda.
La tecnología de gemelos digitales se utiliza cada vez más como herramienta para optimizar el rendimiento de un sistema físico mediante la creación de una réplica virtual. Dado que los robots están cada vez más integrados digitalmente en las fábricas, los gemelos digitales pueden utilizar sus datos operativos del mundo real para realizar simulaciones y predecir resultados probables. Como el gemelo existe puramente como modelo informático, puede someterse a pruebas de estrés y modificarse sin implicaciones para la seguridad, al tiempo que se ahorran costes. Toda la experimentación puede comprobarse antes de tocar el mundo físico. Los gemelos digitales tienden un puente entre el mundo digital y el físico.
La robótica está experimentando avances significativos en los humanoides, diseñados para realizar una amplia gama de tareas en diversos entornos. El diseño similar al humano, con dos brazos y dos piernas, permite utilizar el robot con flexibilidad en entornos de trabajo que en realidad fueron creados para humanos. Así puede integrarse fácilmente, por ejemplo, en procesos e infraestructuras de almacén ya existentes.
El Ministerio chino de Industria y Tecnología de la Información (MIIT) ha publicado recientemente objetivos detallados sobre la ambición del país de producir humanoides en serie para 2025. El MIIT predice que los humanoides se convertirán probablemente en otra tecnología disruptiva, similar a los ordenadores o los teléfonos inteligentes, que podría transformar la forma en que producimos bienes y la forma en que viven los seres humanos.
El impacto potencial de los humanoides en diversos sectores los convierte en un área de desarrollo apasionante, pero su adopción masiva en el mercado sigue siendo un reto complejo. Los costes son un factor clave y el éxito dependerá de que su rentabilidad compita con soluciones robóticas bien establecidas, como los manipuladores móviles, por ejemplo.
“Las cinco tendencias de automatización que se refuerzan mutuamente en 2024 muestran que la robótica es un campo multidisciplinar en el que las tecnologías convergen para crear soluciones inteligentes para una amplia gama de tareas”, afirma Marina Bill, presidenta de la Federación Internacional de Robótica. “Estos avances siguen dando forma a la fusión de los sectores de la robótica industrial y de servicios y al futuro del trabajo”.
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