“Los extremos nunca fueron buenos”. Cómo atreverse a desafiar años y años de sabiduría popular condensados en refranes, habitualmente muy agudos y de uso común. Refranes que no envejecen nunca, siempre vigentes, tan válidos ayer como hoy. Y es que, casi de la noche a la mañana, hemos pasado a situarnos en un peligroso extremo en el que toda transformación industrial parece que debe ser 4.0, o no ser. ¿Qué ha sido del 3.0?me pregunto. Como nunca fue bautizado con este nombre, ya nadie parece echarlo de menos, no está de moda. Me preocupa estar cayendo en el error de ser absorbidos por el cautivador atractivo de un juguete nuevo, hermoso, brillante y estimulante. La Industria 4.0 como nuevo maná caído del cielo.
A estas alturas ya nadie discute que la Industria 4.0 ha llegado para quedarse. El error no está en abrazar su llegada, sino en olvidar lo viejo para centrarse en lo nuevo en exclusiva. 4.0 no es inmiscible con el pasado, sino todo lo contrario, es absolutamente compatible y complementario.
Un reciente estudio realizado por Sisteplant en empresas de automoción ubicadas en el territorio nacional (englobando a OEMs, fabricantes de componentes, subcontratación de procesos e industria auxiliar) evidencia el gran recorrido aún pendiente en el desarrollo de iniciativas convencionales o prácticas “world-class”. Se identifican tres pelotones de carrera claramente diferenciados en función de su nivel de madurez, pero donde todos y cada uno de ellos reflejan un recorrido pendiente muy significativo en la implantación de prácticas “world-class”:
Refleja una clara necesidad de “mirar con ambas gafas” para desarrollar planes integrales que combinen actuaciones de ambos tipos. Planes realistas, sin despreciar oportunidades convencionales necesarias que aportan resultados tangibles en el corto plazo y que en algunos casos son requisito necesario para seguir progresando en el camino más ambicioso hacia la Industria 4.0.
Las empresas más dinámicas ya se han puesto manos a la obra implantando casos de éxito tangibles. Como ejemplo concreto de esta realidad, dentro del marco de un plan de transformación a cuatro años vista que ayudamos a desplegar a un fabricante de componentes, el balance de esfuerzos dedicados durante el primer año a iniciativas “world-class” vs “4.0” fue 70%-30%.
Una industria 4.0 donde no todo es digital
Asimismo, más allá de la digitalización, la transformación hacia un modelo de fabricación avanzada 4.0 debe afrontarse con mayor perspectiva. La palanca digital en la industria 4.0 es como el fuego para cocinar una paella. No hay opción de cocinarla sin el aporte de calor necesario; eso sí, únicamente con fuego pasaremos hambre.
Industria 4.0 no debe entenderse como digitalizar las operaciones. La diferencia competitiva se alcanza mediante la explotación real que se hace de esta hibridación de los mundos físico y virtual. Es un proceso de cambio en el que deben considerarse aspectos de organización, tecnologías de fabricación, personas y TICs (Tecnologías de la Información y la Comunicación) avanzadas, plasmando nuevos modelos de gestión que modifican con claridad las maneras de hacer tradicionales.
Debemos perseguir la fábrica inteligente, asegurando la generación de conocimiento profundo de nuestros productos y procesos clave. Explicitando el conocimiento para que sea comprendido y utilizado a todos los niveles de la organización. Debemos perseguir la fábrica humana. Capacitando, desarrollando y activando el talento de las personas para marcar la diferencia en este nuevo escenario.
Un error que debemos evitar es pensar que la industria 4.0 es “plug & play”. Soluciones específicas que se van conectando y que pueden operar satisfactoriamente con los mismos mimbres. Mismos mimbres, mismos resultados.
La decisión del camino a tomar está en nuestras manos
Al deshojar la margarita para calmar nuestro desasosiego y averiguar si el amor es correspondido, nos dejamos caer en manos de la casualidad. El número de pétalos de la margarita obedece a la secuencia de Fibonacci (donde cada número se obtiene a partir de la suma de los dos anteriores …, 8, 13, 21, 34, 55,…), lo que implica que el resultado siempre será imprevisible, en ocasiones par y en otras impar. Podemos dejarnos llevar o podemos trazar nuestro camino.
Si queremos incrementar nuestra competitividad en esta nueva era debemos interiorizar con rapidez las nuevas oportunidades que aparecen de la mano de la Industria 4.0 y, simultáneamente con la implantación de oportunidades convencionales, pasar a la acción para generar riqueza industrial y empleo de alto valor añadido.
La realidad competitiva del sector apremia a evolucionar sin pausa en un entorno cada vez más complejo, con más incógnitas a despejar que exigen mayor perspectiva y nuevas capacidades, aunque también nuevas áreas de oportunidad.
Desde luego, si algo no podemos negar es que el camino se hace mucho más emocionante.
Reconocen a Jose Arreche (SEAT S.A), María Pilar Carruesco (AutoForm), Antonio Cobo, Eduardo González y KUKA.
Del 20 al 21 de noviembre se ha celebrado Advanced Manufacturing Madrid, evento que aúna los salones MetalMadrid, Composites Madrid y Robomática. La cita, como de costumbre, ha tenido lugar en IFEMA MADRID y ha reunido a más de 600 expositores.
Más de 8.000 asistentes presenciales en IFEMA MADRID de. 19 al 21 de noviembre.
Gracias a la realidad aumentada, los operarios pueden acceder a procesos guiados que mejoran su aprendizaje y experiencia, para logar formar a los empleados de la fábrica del futuro. Fernando Colás, CEO de Omron Industrial Automation Europa, comentó: "En un entorno de fabricación en constante cambio, integrar los mundos físico y digital no solo es una ventaja, sino una necesidad.
En su ponencia en Advanced Manufacturing Madrid “Nissan Ávila, la innovación como pilar clave en la fabricación de componentes de automoción”, Nuria Cristóbal, directora de la planta, Javier Amador, responsable de desarrollo de negocio y Luis Bajo, Corporate Communications S. Manager y moderador de la conferencia, destacan cómo la innovación, la automatización y la agilidad han sido fundamentales en la planta.